Colombia es un país que poco acepta la diferencia de pensamiento, es radical a la hora de seguir una ideología. Así existan varios partidos, movimientos, alianzas políticas, finalmente esto vuelve y se resume como en el siglo pasado, liberal y conservador, llamándolo de otra manera un poco moderna: Derecha e izquierda.
Causa desconcierto ver cómo se estigmatiza a las personas que piensan distinto, hay una gran lista de colombianos que soñaron con un país grande y justo, respetuoso de diversidad, de proyectos democráticos, planes distintos al del gobierno, de turno cada uno de estos personajes pagó con su vida o por qué se les tildó de “guerrilleros”…
A Jaime Garzón también se le incriminó por ser mediador entre la guerrilla de las FARC y el gobierno de Andrés Pastrana (1998-2002) “al parecer este exigía dinero a las familias de los secuestrados con el fin de entregarlo a la libertad nuevamente”, y por ello estaba en los procesos de entrega; señalándolo como criminal, de tener lazos con el grupo armado, por ser un gran crítico del estado, por fomentar cambios en el pensamiento de muchos jóvenes universitarios.
A Piedad Córdoba se le reprocha y podría decir que por parte del entonces presidente Uribe existió una persecución política, por mantener estrechas relaciones con el fallecido presidente de Venezuela Hugo Chávez de ideas comunistas, para Uribe toda una amenaza. Por esta razón la inteligencia del DAS interceptó todas sus llamadas y esculcaron todas sus finanzas con el fin de intentar dañar la imagen de la exsenadora.
Muchos colombianos han sufrido de calumnia o señalamiento por pertenecer a X partido o tener una ideología respecto al manejo del país como ocurrió en varios casos: Fernando Vallejo (escritor Colombiano) Aida Avella (Unión Patriótica) sólo por citar algunos casos.
Lo indignante es que quienes más señalan son los que tienen ‘rabo de paja’. Lo sucedido con el Doctor Antanas Mockus, quienes muchos Colombianos reconocemos por su honorable carrera, sinónimo de anticorrupción. Es acusado irónicamente por el Señor Álvaro Uribe, de realizar la movilización por la vida, ganaría un contrato. Por suerte el ‘profe ‘días atrás de la acusación, había denunciado el robo de sus computadores, donde tenía la información de la marcha que se realizará el próximo 9 marzo.
Políticos que no convencen con ideas, ni destruyen su contendor con debates, ni planes de gobierno; por el contrario desprestigiando y calumniando la imagen de su opositor
¿Y así queremos lograr la paz?
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